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La legionelosis es una enfermedad causada por la exposición a una bacteria que habita en aguas superficiales. La probabilidad de padecerla dependerá de la concentración de dicha bacteria en el lugar, y de la edad de la persona expuesta.
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La bacteria que causa la legionelosis se conoce como Legionella pneumophilia. Aunque su hábitat natural son las zonas con agua como ríos o embalses. Puede aparecer en cualquier otro lugar: casas, edificios, hospitales, hoteles, gimnasios… Gracias a que coloniza los sistemas de suministro de las ciudades.
Por ello, no basta con seguir una simple rutina de limpieza en el hogar u otras instalaciones. Como empresa de control de plagas, insistimos en la importancia de aplicar las correctas medidas de control y prevención. Tal y como establece el real decreto 865/03, de 4 de julio. Y de esta forma, ganar en calidad de vida.
¿Cómo se contagia la Legionella?
Al contrario de lo que se suele pensar, esta bacteria no se transmite cuando bebes agua, ingieres un alimento, o entras en contacto con personas u animales. La principal vía de infección por legionella es la inhalación. Es decir, cuando el agua contaminada que hay pulverizada en el ambiente accede a las vías respiratorias.
¿Existen espacios más proclives a la presencia de Legionella?
Con la llegada del buen tiempo, ciertos emplazamientos como gimnasios o centros comerciales, están en el punto de mira. En ellos, se utilizan grandes sistemas industriales de climatización que necesitan agua para refrigerar el ambiente. Incrementando así, el riesgo de contagio por Legionela.
Igualmente, existen otras instalaciones con altas probabilidades de desarrollar esta bacteria. Y que deben contar con un adecuado programa de prevención de la legionelosis. Éstas son:
- Torres de refrigeración
- Condensadores evaporativos
- Sistemas de agua caliente sanitaria
- Sistemas de agua climatizada con agitación constante (spas, jacuzzis, piscinas o bañeras de hidromasaje)
Y te preguntarás, ¿qué condiciones favorecen su aparición? La Legionella no depende de grandes factores para su crecimiento y desarrollo. Únicamente que el agua esté estancada y su temperatura oscile entre los 20 y 45 grados.
Desde Gelimser, como especialistas en control de plagas, queremos ofrecerte algunas recomendaciones sobre cómo evitar la legionella y prevenir sus síntomas.
Prevención y control de la legionelosis
A pesar de que la legionelosis no puede prevenirse individualmente, sí que puede aplicarse ciertas medidas higiénico-sanitarias. Tanto en el hogar como en cualquier otra instalación. Desde nuestra empresa de control de legionella en Málaga, te aconsejamos:
- Limpiar los equipos de aire acondicionado
- Desinfectar bañeras y jacuzzis
- Purgar los grifos
- Eliminar la cal
- Usar alcachofas de ducha de gota gruesa
- Evitar el agua estancada
- Mantener la temperatura del termo térmico por encima de 60 grados
Además, es obligatorio que aquellos establecimientos que usen agua o produzcan aerosoles. Y se sitúen en el interior o exterior de edificios, instalaciones industriales o medios de transporte. Cumplan con la normativa para la prevención de legionelosis del Real Decreto 865/2003. Es el caso de los colegios, residencias, hoteles, gimnasios y centros comerciales, entre otros.
Todos ellos deben limpiar y desinfectar los sistemas señalados en el protocolo de RD 865/03, disponer de un programa de mantenimiento específico, realizar evaluaciones periódicas, y controlar la presencia y ausencia de la bacteria de la legionelosis.
¡La prevención es la clave de todo! Por ello, en Gelimser, contamos con un específico programa de prevención de la legionelosis adaptado a tus necesidades. Con el objetivo de impedir focos infecciosos que favorezcan el desarrollo de enfermedades. No juegues con la salud, contacta con nuestros profesionales en control de plagas.
